Sylvie y Olivier Lacroix decidieron asumir el reto de darle vida a esta exquisita casa durante nueve meses del año. Presentes siempre como anfitriones, en conjunto con todo el equipo, que recibir a sus clientes como sus propios amigos es de capital importancia. Así, se esfuerzan para que la estadía en Bassibé sea lo más agradable posible.
Un verdadero arte del buen vivir y ambiente familiar harán de su estadía un momento privilegiado. |